Por Patricia Ojeda Millahueque
Profesora de Historia y Geografía
Magíster en Educación
Profesoras y profesores desde hace algunos años hemos estado bajo la sombra de acusaciones por adoctrinamiento. Y tal como si estuviéramos enfrentándonos a una marea, las reclamaciones sobre este tema van y vienen cada cierto tiempo.
Por ejemplo, a fines del año 2019, en el contexto del Estallido Social, se realizaron más de 50 denuncias a la Superintendencia de Educación por adoctrinamiento, las cuales fueron en su mayoría desestimadasi. En Julio del año 2022, por redes sociales, un empresario osornino y activista de la campaña por el Rechazo a una nueva constitución, acusó a los profesores de “envenenar el alma del país en los niños” y amenazó con fusilar a los profesores adoctrinadores. El Colegio de Profesores realizó una tibia defensa desde su canal de YouTube, mencionando que “No es posible que se venga a basurear a las profesoras y profesores de Chile, es tiempo de desterrar el odio”ii. Incluso este año, en abril del 2023, se denunció que algunas imágenes del libro "Las lecciones maravimágicas de Lulú", utilizado en la asignatura de Lenguaje y Comunicación en un colegio de Villa Alemana, eran alusivas al estallido social y el proceso constitucional del año 2022iii. Algunos apoderados del establecimiento y el Diputado Andrés Longton (RN) consideraron que esas imágenes demostraban una evidente apología a la violencia y a la insurrección social.
No son solo los profesores de ciencias sociales y humanidades los que son acusados de “adoctrinadores”, si no que al sistema educativo por completo se le juzga por sus malas intenciones. Basta recordar el caso del Ministro de Educación, Marcos Ávila, quien a principios del año 2023 fue acusado de instalar su “agenda ideológica”. En aquella oportunidad, la acusación estaba sustentada en la publicación de la guía “Orientaciones para la inclusión de las personas Lesbianas, Gays, Bisexuales, Trans e Intersex en el sistema educativo chileno” del año 2017, documento desactualizado que ya no era utilizado por los establecimientos educacionalesiv. También podemos rememorar, cuando el presidente de RN Francisco Chahuán y el Diputado UDI Jorge Alessandri manifestaron su preocupación por el nombramiento del nuevo Ministro de Educación, en agosto del año 2023, debido a la posible “sobreideologización” que podría tener la cartera al ser liderada por un miembro del partido comunista.v
Si nos enfocamos en lo que sucede en la sala de clases, múltiples investigaciones dan cuenta de cómo las creencias de los docentes impactan en las prácticas docentes. Además, el currículum escolar, lejos de ser inocuo, es una selección intencionada que busca la reproducción cultural y que está organizado por el Estado, en el caso chileno. En otras palabras, no existe la neutralidad en educación. Sin embargo, se espera que los y las profesoras entreguen información neutral en sus clases y que, de alguna forma, sean seres apolíticos, sin género, religión, clase o nacionalidad. O por el contrario, que tengan religiones específicas, como es el caso de algunos colegios ligados a iglesias; género específico, como es el caso de la educación parvularia en Chile; o incluso una clase social determinada, como se ve en algunos colegios de élite chilenos.
Es así como los profesores convivimos en un sistema lleno de contradicciones. Trabajamos en un espacio donde nuestro rango de acción y nuestra libertad de cátedra se ve mermado por las presiones que nos impone la sociedad. Tanto es así, que incluso hablar en las clases sobre la dictadura cívico militar ocurrida en Chile desde 1973, puede ser una causa para ser despedido. Es de conocimiento público el caso del docente que en el año 2018 fue desvinculado por esta razón, y en donde la directora del establecimiento educacional le dijo: “que esos temas era mejor no tratarlos. Que si los niños creían que era un gobierno militar, bueno que era mejor dejarlo así”vi.
En este contexto, la llegada de la asignatura de Educación Ciudadana ha sido todo un desafío para los profesores. Primero, porque la mayoría de quienes realizan esta asignatura no recibieron formación específica sobre la educación ciudadana en su formación inicial. Segundo, porque desde el Ministerio de Educación no han existido esfuerzos por realizar capacitaciones y una formación continua a los docentes que imparten esta nueva asignatura. Y tercero, porque existe una parte de la población que exige a los docentes evitar la controversia política y los conflictos sociales y tratar el contenido como si fuera estático, neutral y objetivo.
La Ley 20911 (2016), que mandata la creación de esta asignatura, tampoco es muy clara con respecto a qué ciudadanos se pretenden formar en las escuelas. Uno de los objetivos que se proponen es “fomentar en los estudiantes el ejercicio de una ciudadanía crítica, responsable, respetuosa, abierta y creativa”. Una definición amplia y ambigua que puede ser utilizada para diferentes propósitos, pero también, que se puede convertir en una normativa que salvaguarde el trabajo de profesores y profesoras. En clases podemos hablar sobre actualidad, política, ideología, democracia y mecanismos de participación, porque son contenidos de la asignatura de Educación Ciudadana y porque existe una Ley que promueve una ciudadanía activa y por tanto, que fomenta la discusión y el diálogo entre pares. Estamos en el momento perfecto para abrir la sala de clases a la controversia política, al diálogo en torno a los derechos fundamentales y a promover el conocimiento de distintos tipos de democracia.
Sin embargo, en el contexto de fuerte deslegitimación de nuestra clase política, constantemente se presenta la interrogante ¿Para qué se hace formación ciudadana si finalmente los políticos toman las decisiones sin considerar las necesidades ciudadanas? ¿Acaso los ciudadanos podemos combatir las desigualdades estructurales?
No existe la asignatura de Educación Ciudadana solo para memorizar los mecanismos de participación cívica, los partidos políticos o los poderes del Estado. La educación ciudadana implica estudiar nuevos saberes, habilidades y actitudes que nos permitan convivir en sociedad. Su aprendizaje es progresivo y comienza con aprender a conversar, dialogar y discutir. Implica profundizar en las distintas posturas que existen sobre temas contingentes o controversiales y evidenciar el enfrentamiento ideológico que existe. Los docentes están llamados a promover una mirada profunda y crítica a los problemas sociales que nos aquejan como sociedad y a que los estudiantes sean capaces de imaginar y planear soluciones creativas a los problemas que los aquejan.
El desafío para las y los profesores es promover el diálogo en la sala de clases sin participar directamente en él. Por ello, es necesario utilizar todos los recursos y fuentes posibles para dar cuenta de las distintas posturas que existen en la sociedad. Los docentes debemos promover el diálogo a través de una selección exhaustiva y rigurosa de los materiales didácticos. Esto tiene algunas ventajas, porque si los profesores no tomamos una postura personal explícita en la sala de clases, los estudiantes se sentirán en mayor libertad para mostrar sus opiniones si estas difieren a las de sus compañeros.
En síntesis, es deber de los docentes nunca evitar los temas sensibles, diiciles e incómodos en la sala de clases. Pero nunca intentar demostrar que una postura, partido político o ideología es la correcta. Precisamente eso sería caer en el adoctrinamiento. Nuestro rol es demostrar que existen desacuerdos en la sociedad y que el conflicto está bien, porque estas dificultades son parte de la convivencia democrática. Por ello, los estudiantes deben aprender a que no siempre van a estar de acuerdo con las opiniones de sus compañeros de clase y que, en general, las personas tenemos distintas posturas. Así podrán comprender la importancia de fundamentar sus opiniones con respeto por el interlocutor.
Otro de los desafíos que demanda la asignatura de Educación Ciudadana a las y los docentes es ser firmes en que aunque la discusión en la sociedad es siempre provechosa, no todos los temas son controversiales y no todas las opiniones son válidas. Vivimos en sociedad porque hemos logrado mínimos acuerdos que nos permiten convivir, y en el caso chileno, estamos comprometidos en respetar la democracia y defender los derechos humanos. Por lo tanto, defender nuestra postura irrestricta al respeto por la democracia y los derechos humanos no es adoctrinamiento, es demostrar que el trabajo docente tiene una función política y no es un mero profesional que tiene un rol técnico en la educación. Somos responsables de formar a ciudadanos activos. No somos seres apolíticos y debemos defender los mínimos necesarios para convivir en sociedad.
Esta postura no implica el adoctrinamiento ni la adscripción a alguna ideología. Muchos docentes somos críticos del modelo en que vivimos y de la democracia que se ha forjado. Pero se puede mejorar nuestra democracia promoviendo un diálogo fructífero y podemos promover el pensamiento crítico salvaguardando el compromiso por los derechos humanos. En otras palabras, esto significa fomentar una sana convivencia en la escuela, aprender a resolver conflictos y promover una sociedad más democrática desde nuestra sala de clases, nuestras escuelas y desde nuestras localidades.
Significa aprender a convivir como ciudadanos activos en una sociedad democrática.
i Said, Carlos, “Adoctrinamiento” en los colegios: de 50 denuncias recibidas, la mayoría fue descartada y en solo cuatro casos hubo sanción. Publicado en La Tercera el 11 de febrero de 2020. https://www.latercera.com/la-tercera-pm/noticia/adoctrinamiento-en-los-colegios-de-50-denuncias-recibidas-la-mayoria-fue-descartada-y-en-solo-cuatro-casos-hubo-sancion/1006282/
ii Seguel, Alfredo, “Se ha cruzado una línea muy peligrosa”: Activista por el Rechazo ahora amenaza de muerte a profesores y profesoras. Publicado en El Ciudadano en julio del año 2022. http://hEps://www.elciudadano.com/actualidad/se-ha-cruzado-una-linea-muy-peligrosa-acJvista-por-el-rechazo- ahora-amenaza-de-muerte-a-profesores-y-profesoras/07/29/
iii Fuentes, Cristóbal. Apoderados de colegio en Villa Alemana denuncian adoctrinamiento por libro con símbolos alusivos al estallido social. Publicado por Meganoticias el 15 de abril de 2023. https://www.meganoticias.cl/nacional/411542-apoderados-denuncian-adoctrinamiento-colegio-altomonte-villa-alemana-15-04-2023.html
iv El Mostrador Braga. Por contenido inexistente en guía: anuncian acusación constitucional contra Ministro de Educación. Publicado el 30 de mayo 2023. https://www.elmostrador.cl/braga/2023/05/30/por-contenido-inexistente-en-guia-anuncian-acusacion-constitucional-contra-ministro-de-educacion/
v CNN Chile. Chahuán, presidente de RN: “El cambio es cosmético. Nos parece delicado el nombramiento de Nicolás Cataldo como ministro de Educación, esperamos que no haya una sobreideologización”. Publicado el 16 de agosto de 2023. https://twitter.com/CNNChile/status/1691874722009534678 Y 24 Horas TVN Chile. Diputado Alessandri: “Nos preocupa que un ministro de Educación sea comunista” publicado el 17 de agosto 2023. https://www.youtube.com/watch?v=2hCxulagkBo
vi El Desconcierto, Profesor ganó juicio tras ser despedido por enseñar la palabra “dictadura” en colegio de Las Condes: “Les dije que el golpe militar no era un gobierno” Publicado el 04 de enero de 2019. https://www.eldesconcierto.cl/educacion/2019/01/04/profesor-gano-juicio-tras-ser-despedido-por-ensenar-la-palabra-dictadura-en-colegio-de-las-condes-les-dije-que-el-golpe-militar-no-era-un-gobierno.html